lunes, 16 de diciembre de 2013

NO DUDES DEMASIADO EN LA VIDA

Cuando tengamos que tomar una decisión lo peor que podemos hacer es encerrarnos en la duda. Esta dificultad en la toma de decisiones refleja miedo o falta de autoconfianza.
No deberíamos demorarnos en realizar las cosas que tengamos pensado hacer. Si para cada asunto cotidiano gastamos mucho tiempo pensando en ello, significa que existe un miedo a mostrarnos tal y como somos ante otras personas, en definitiva, una gran falta de seguridad personal y una gran dependencia de los demás. Pero así sólo estaremos anulando sin darnos cuenta nuestras propias ideas u opiniones. Es bueno apreciarse uno mismo sin la necesidad del reconocimiento externo. Las opiniones de los demás deben tenerse en cuenta pero sin llegar a condicionar quienes somos.
También el temor a equivocarse nos puede llevar a la indecisión. Es algo infantil ser demasiado indeciso por miedo a cometer un error. Para reducir este miedo podemos intentar trivializar las posibles consecuencias malas que tengamos en nuestra imaginación. Procuremos tener verdadera seguridad en nosotros mismos a la hora de tomar decisiones.

Una auténtica seguridad en uno mismo no implica negar las propias limitaciones ni tampoco creer que vamos a poder con todo. La seguridad se obtiene entre otras cosas a partir de aceptarse y quererse tanto con los éxitos como con los fracasos. Cuando la duda en uno mismo es algo permanente y por ello no pasamos a la acción deberíamos fiarnos más de nuestros criterios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario