Aunque en ocasiones nos resulte difícil hemos de procurar
mirar la vida con una sonrisa ya que esto fortalece nuestras defensas
psicológicas y sistema inmunológico.
Cuando las cosas no son de nuestro agrado solemos verlo todo
desde una perspectiva muy negativa. Será mejor mirar lo que nos esté ocurriendo
con un enfoque alegre y optimista. Podemos centrarnos en las experiencias
agradables que nos han ocurrido a lo largo de nuestra existencia. Los pequeños
problemas están lejos de ser crisis profundas, por el contrario, podremos
verlas como posibilidades de avance.
Para acercarnos a la alegría de vivir podemos plantearnos la
superación de los conflictos personales del día a día. Asimismo, tendremos que
tratar de sobrevivir filtrando nuestras experiencias con una óptica buena.
MARIU