lunes, 21 de octubre de 2013

CONSEJOS PARA ENFRENTAR LOS PROBLEMAS

Te ofrecemos unos cuantos consejos que te serán útiles para seguir adelante y buscar la felicidad:

NO PENSAR QUE EL MUNDO ES INJUSTO CON NOSOTROS CUANDO TENGAMOS PROBLEMAS. La autocompasión no nos llevará a mejorar, sino que nos paralizará puesto que haremos responsables de nuestros males a factores y no nos preocuparemos nada por buscar soluciones. De hecho, si nos ponemos a pensar bien el mundo es a veces injusto con todo el mundo. Por eso no hay que amargarse. No es una cuestión de justicia, a veces nos tocan cosas buenas y a veces cosas malas, aunque pensemos que no las merecemos.

EXPLORA QUÉ DEJA HUELLA EN TU AFECTIVIDAD Y EL MOTIVO. Los estados melancólicos nos suelen paralizar e impedir que veamos objetivamente lo que nos esté ocurriendo. Entonces nos será bastante difícil echarle mano al problema. Cuando nos sentimos decaídos o sin ganas de hacer nada algo que no sabemos cómo manejar nos está afectando. Debemos averiguar la causa para poder afrontar la situación.


ENCONTRAR UNA RAZÓN PARA VIVIR A PESAR DE LOS MALES QUE TE ESTÉN SUCEDIENDO. Debemos plantar cara a los pensamientos negativos y tratar de sustituirlos por aquellas cosas de la que estemos recibiendo buena energía. No centrarte en los problemas, disfruta y cuida lo bueno que tienes, porque si no a lo mejor lo pierdes de tanto lamentarte.
PROCURAR QUE LAS MALAS EXPERIENCIAS NO NOS PROVOQUEN UN TRAUMA. Está en nuestras manos todo lo negativo que nos ocurra no se transforme en nuestra memoria en algo traumático cada vez que se recuerde. Podremos curar nuestras si miramos lo positivo que también tenía el hecho nefasto. Así hay que pensar en los problemas sin angustia excesiva, aquellas cosas buenas y beneficiosas que extrañamente tienen las cosas negativas.

PON EN MARCHA TUS PROPIAS CAPACIDADES RESOLUTIVAS. Estas nos permitirán replantearnos nuestra forma de pensar y de actuar. Así aquellas situaciones que a priori parece que únicamente son dolorosas podrían convertirse en constructivas.


CUIDAR A NUESTRO NIÑO INTERIOR. A pesar de que todos los seres humanos crezcamos siempre nos queda una parte de nuestra infancia en nuestro interior que se mantiene inocente. No pierdas esa inocencia y no te dejes influir por experiencias anteriores que dejan una creencia falsa de que todo lo sabes.

lunes, 14 de octubre de 2013

CONSISTENCIA ENTRE LO QUE PENSAMOS Y LO QUE HACEMOS

Lo que hagamos ha de ser siempre acorde con aquello que pensamos.

De esta manera todo lo que hagamos habrá de ser lógico y encajar con nuestra forma de ser y/o pensar. A veces todos podemos tener incoherencias entre lo que pensamos y cómo nos comportamos. Pero lo ideal sería que hubiese una sintonía entre ambas cosas. En otras palabras hay que ser fiel a uno mismo de manera que planifiquemos cada minuto de nuestra vida en función de nuestro propio ser. Hemos de gestionar nuestro tiempo de manera que encaje con nuestro carácter. Se consciente de que la manera de comportarte  te define ante los demás. Por lo tanto, has de hacerlo en función de tus ideas verdaderas. Controla tu vida en función de cual sea tu ideología, siendo fiel a tus ideas. Si lo haces de manera contraria a tu personalidad te sentirás mal.
A pesar de que haya momentos en los cuales te resulte algo difícil eres tú mismo quien debería llevar tu vida por donde quisieses que fuera. Y del mismo modo has de ser tú mismo quien ponga el remedio a tus problemas. Muchas personas dejan de mano de allegados o de medicamentos la dirección de su vida. La vida es una lucha en la que uno es el soldado más valioso para ganarla. La supervivencia es algo que deberíamos buscar por nosotros mismos y no esperar a que otro nos salve. Por ello la fuerza para continuar adelante en momentos difíciles hemos de buscarla en nuestro interior y no en otros. Y la solución ha de ser coherente con lo que pensamos.

También hemos de liberarnos de miedos irracionales. En ocasiones tenemos miedo y nos ponemos a la defensiva ante algo sin que haya un sentido lógico y sin haber examinado bien cuál puede ser el motivo, de forma que quizás salgamos corriendo sin que haya un motivo razonable para ello. Vale la pena intentar ser valientes, aunque curiosamente resulte algo difícil ya que puede más el corazón que el cerebro en momentos difíciles. 

lunes, 7 de octubre de 2013

HACER DE LA SOLEDAD NUESTRA ALIADA

Cada uno de nosotros debería dedicar un tiempo diario a estar solo. Es bueno emplear media hora al día en estar contigo mismo ya que la soledad es una vivencia que aunque en principio parece negativa puede transformarse en beneficiosa.
Cada día debemos afrontar problemas, y hay que optar por llevar el timón de la propia vida. Existe una expresión popular y graciosa que es esta: “mejor sola que mal acompañada“. Y es cierto que muchas veces las cosas nos salen mejor si las pensamos y reflexionamos nosotros solos. No se trata de ser poco sociables pero si de decidir y actuar en muchas ocasiones sin la ayuda de nadie. Existen muchas soluciones a nuestros problemas que están en nuestro interior, y deberíamos buscarlas con la ausencia de consejos externos. Tratemos de aprovechar al máximo los instantes diarios en los que estemos solos para descubrir los recursos que tenemos para movernos en la vida. Además, decidir y elegir hacer ciertas cosas sin ayuda será útil para extraer conocimientos beneficiosos de ello.
Además nos solemos concentrar mejor para pensar cuando estamos solos. Luego las decisiones que tomemos serán más reflexivas. Existe un universo interior al cual únicamente podemos acceder mediante la soledad. Por ello hay que potenciar la reflexión individual y la meditación como actividad diaria al menos durante media hora.
La comunicación interna es necesaria para aclarar ciertas cosas con uno mismo, sin que nadie más intervenga. Es la forma de aprender a desarrollar una visión personal clara, realista y positiva. Evaluar nuestro yo espiritual o saber quienes somos realmente es algo que se logra mediante reflexiones individuales. Así seremos capaces de reconocer nuestras habilidades y defectos para poder efectuar las correcciones oportunas de manera voluntaria, y aceptarse uno mismo tras haberse valorado detenidamente.  Una autoestima saludable se forma a partir de tener conciencia tanto de lo bueno como de lo malo que uno tiene en su interior. Potencia el tratar de conocerte a ti mismo lo más realista que puedas. Sea cual sea el resultado de tu evaluación personal convéncete de que tu vales mucho.

Es importante una perspectiva individual para manejar nuestra propia vida. Debemos tomar las decisiones importantes sin necesidad de las palabras de otros.