Es importante tener metas en la
vida. Pero los sueños hay que perseguirlos con los ojos abiertos para ver la
realidad. Es decir, tenemos que tomar perspectivas realistas y a la vez
positivas en nuestro camino. Hay varias cosas que no deberíamos hacer y una de
ellas consiste en querer abarcarlo todo sin razonar antes cuáles son nuestras
posibilidades.
Cuando las circunstancias son adversas
o muy dramáticas no deberíamos soñar con lo imposible sino ver la forma de
superarlas y adaptarnos a la nueva situación. Es importante tener una visión
realista de nuestras posibilidades y actuar de manera acorde. Hay que creer en
nosotros mismos pero de una manera realista. De esta forma podremos sacar
provecho de nuestro potencial real.
Además hay que tener en cuenta
que las cosas no tienen por qué avanzar rápidamente, y las cosas no se
consiguen de forma inmediata. Las prisas no son buenas para nada. Los mejores los frutos se dan a largo plazo. Es
muy posible que suframos percances inesperados, pero no debemos sentirnos
desamparados sino disponernos a disfrutar del resto de las cosas que tenemos
sin pensar que nuestra vida es una ruina. Saquemos el lado positivo de ese
cambio que se ha dado en nuestra vida. Luchemos contra la herida interna que ha
aparecido en nosotros aceptando el pasado y procurando disfrutar de lo que
tenemos en el presente. Únicamente aceptando lo que hemos perdido disfrutaremos
y aprovecharemos el presente. Si es necesario deberíamos plantearnos la
posibilidad de que quizás no tengamos mucho éxito en el camino inicialmente
marcados, pero sí aprenderemos muchísimo. Procura poner todas tus fuerzas
simplemente en la alegría de vivir.
Es importante reflexionar sobre
nosotros mismo y lo que nos pasa. Meditemos y miremos hacia nuestro interior. Es
importante escucharse uno mismo. Así, aprendiendo de nuestros errores, podremos
actuar de la forma más correcta. Muchas veces actuamos “a lo loco“ por no haber
reflexionado antes sobre lo que nos ocurre.
Por último, uno de los pasos importantes
para ser felices se encuentra en estar de acuerdo y satisfecho con lo que uno
hace. Nadie es perfecto pero será bueno que nos sintamos a gusto con nuestra
persona, y nos sintamos bien cuando nos miremos al espejo. Hay que valorarse a
uno mismo para desenvolverse en la vida. Confía en ti mismo y no te sientas
desafortunado a causa de tus defectos. Intenta modificarlos y lograrás ser como
desearías.
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