No se posee una “varita mágica” para cambiar aspectos de nuestra vida que no nos gustan, sino que es necesario entrenar tu mente para ir avanzando. Las claves para efectuar estos cambios que todo lo bueno se adquiere aceptarse uno mismo tal y como es. Conviene hacer una especie de lista de aquellas cosas que hay que modificar, y que sean cosas razonables, sin perseguir fantasías. Uno debería marcarse metas y objetivos alcanzables en su caso y en ese momento. Es preciso desarrollar un gran potencial de adaptación a las cosas nuevas que aparezcan en nuestra vida, y que nuestros pensamientos se guíen por una actitud optimista y esperanza.
El sufrimiento tras un trauma puede reducirse si reaccionamos sin temor a desastres. . Para llegar a tener una vida plena hay que aceptar las cosas malas que son inevitables. Posteriormente debemos controlar nuestros pensamientos en estas circunstancias. Tras una experiencia amenazante nunca hay que dar un paso atrás por cobardía. En cambio, procuremos no amargarnos sino atrevernos a tomar decisiones en nuestra vida, con tranquilidad y con valor.
Independientemente de las circunstancias por las que atravieses en tu vida has de tratar de caminar tras la felicidad y la evolución personal.
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