Cuando uno se propone llegar y establece
los pasos para conseguirlo sea constante en su plan. Depende de la propia actuación
el lugar a donde lleguemos. Debemos permitir salir a la superficie todas
aquellas cosas interiores que nos impulsen al camino ideal para lograr el
objetivo que nos hayamos marcado, y sobre todo, ser fiel a ti mismo y a tus
ideas. Esto es algo imprescindible para vencer las dificultades que seguramente
se nos van a presentar en el camino.
Siempre existe una opción viable
que podemos recorrer, pero este camino no debe desviarse de nuestras creencias.
Si elegimos un camino poco coherente con nosotros mismos nos desviaremos de
nuestro plan de vida. Seguro que habrá momentos en los que este camino que será
duro, y exigirá un trabajo infatigable, pero se nos recompensará al final del
camino. Será importante que adaptemos nuestro ritmo a las nuevas
circunstancias. Nuestro camino estará en función del objetivo que nos hayamos
trazado y de nuestras convicciones, y lo debemos recorrer sin prisa y con
paciencia.
La vida está continuamente ofreciéndonos oportunidades que la enriquecen
y que contrarrestan lo malo. Las emociones, pensamientos y actitudes negativas
deberían ser sustituidos por la alegría y focalizar nuestra mente en algo
positivo. Este es un poder que encontramos en nosotros mismos: observar
racionalmente cualquier situación problemática para ser capaces de afrontarla. Procuremos
realizar una respuesta que potencie todo lo positivo que poseemos en nuestro
interior.
DEBEMOS
VIVIR LAS CRISIS COMO OPORTUNIDADES DE CRECER PERSONALMENTE. SÉ POSITIVO
No hay comentarios:
Publicar un comentario